-Mamá, te informo de que he crecido cinco centímetros.  -¿Desde cuándo? -No sé… A los nueve años, cinco centímetros son una maratón. Minichuki lo sabe y se chulea solemne desde sus cuarteles de verano, donde su abuela paterna marca con rotulador año tras año los desmanes de su crecimiento en la pared del garaje. Un graffiti tierno que prueba que la enana no tiene previsto…