El dolor agudo de muelas es como un novio celoso. No deja lugar a nada ni nadie más. Desde el punto de vista metafórico es un alambre al rojo vivo que te atraviesa un lateral de la mandíbula, irradiando hacia el oído y la garganta. Después te da un rato de tregua, como para que te confíes y creas que ya se fue montado en…