1.Última convocatoria para reengancharse al nuevo año.  Lunes de recuperación de rutinas, de inicio de dietas absurdas para limpiar el colon (esa alcantarilla sospechosa), de matrículas en el gimnasio que no pisaremos, de abandono de vicios necesarios (sustitúyanse por otros, o será afán inútil), de lluvia terca y vuelta definitiva a la etiqueta laboral. Sí, hubiera sido mejor no haberse despertado, pero un paseo bajo…