El sexo forzado dentro del matrimonio no es delito en algunos países. Europeos, no hace falta irse más lejos. En Bulgaria, Estonia, Polonia o Hungría el vínculo “sagrado” es una licencia para follar gratis. Con perdón. Aunque sea a costa de ella. Un pasaporte para que el deseo campe a sus anchas sin un gramo de respeto, de alteridad por la persona a la que…