De cuando en cuando, Venecia se hunde. Es una noticia recurrente y me la encuentro esta mañana. Que Venecia se hunda supone que se hunde nuestro ADN romántico más tópico. La épica del viaje. Los canales como posibilidad de una aventura remada entre palacios que se traga la bruma. Si se hunde Venecia mueren Thomas Mann y tanto cine evocador y de aventuras. Venecia no…