Sostiene V. que los ricos mueren de otra manera. Y aporta pruebas con nombre y apelidos: accidentes de avioneta, sobredosis con drogas de alto diseño, infartos en el jacuzzi, despistes en el Everest… En realidad, de las muertes de la clase media y baja  apenas nos enteramos. Salvo que sean truculentas, en cuyo caso pasan a la sección de “sucesos”, esa que ya no se…