Paula Rego El sentimiento es “cosa de mujeres”. Algunas lo recogen, lo meten en una cazuela con almíbar y lo sirven en forma de libro mediocre sobre el que se lanzan los buitres carroñeros de uñas afiladas. Así se alimenta la fantasía del sentimentalismo barato (femenino) y se proclama y consolida de generación en generación. Fin de la historia. Soy mujer. Siento profundamente, luego existo….