Cuando llega junio se me pone cuerpo de vacaciones y no tengo regreso. Junio es la perspectiva de días eternos donde estar atenta al desmayo tardío del sol.  Lo mejor del verano es la sensación de que te queda todo por delante, ese urdir planes como si el resto del año nos fueran dados y ahora gozásemos de libertad condicional para domesticar el tiempo. Y…